Los cuentos realistas son historias basadas en hechos reales o imitaciones de la realidad, cuya principal condición es la verosimilitud, esto es, crear el efecto de que lo que se cuenta puede ser cierto.

El origen de un cuento realista es la observación directa del contexto en que el autor vive e intenta reflrejarlo en sus obras. En mi caso, mis cuentos realistas -sean adaptaciones o creaciones de mi imaginación- se basan en el comportamiento de las personas, ya sea frente a la muerte o en cualquier situación cotidiana donde la dualidad de las sensaciones aparecen, honestidad y deshonestidad, egoismo y altruismo o vida y muerte por nombrar algunas. Sin embargo, esta representación nunca es absoluta ya que en la vida real no existe el absoluto.

En mis cuentos realistas introduzco escenarios que me permiten jugar con ciertas cosas, me dan más libertad de creación que ceñirme a la realidad en sí. Aunque el mundo pueda parecerse al real o al que consideramos real, realizo cambios que me sirven al desarrollo de mis historias, sean tanto las adaptaciones que hago como las que son fruto de mi imaginación.